Abstract:
El diagnóstico operativo del proceso de negocio del producto Purdy Card en Financiera CAFSA S.A., realizado mediante una auditoría operativa en 2023, revela una estructura sólida y bien organizada que asegura una gestión eficaz del producto. El mapeo del proceso evidenció que, aunque las actividades clave están claramente definidas y se ejecutan bajo estrictas normativas, existen áreas de mejora que, al ser optimizadas, podrían incrementar la eficiencia operativa y financiera. Se identificó una sobrecarga de responsabilidades en el Coordinador de Tarjetas de Crédito, lo que podría comprometer la eficiencia del proceso. Adicionalmente, se destacó la necesidad de una mayor actualización de las disposiciones internas y de los formularios utilizados para la evaluación de la capacidad de pago de los clientes, que actualmente no coinciden con los parámetros establecidos en la política de tarjetas de crédito.El sistema de control interno, aunque robusto, requiere un monitoreo continuo más dinámico y una mejor integración de tecnologías como Monibyte y Abanks para mantener la coherencia y eficiencia operativa. Además, el análisis financiero reveló que el modelo actual basado en pérdidas incurridas limita la capacidad de la empresa para anticipar y gestionar riesgos crediticios de manera proactiva. Finalmente, la adopción del modelo de pérdidas esperadas de NIIF 9 permitiría una estimación más oportuna de las provisiones, mejorando la transparencia financiera y fortaleciendo la estabilidad a largo plazo.
Description:
The operational diagnosis of the Purdy Card product business process at Financiera CAFSA S.A., conducted through an operational audit in 2023, reveals a solid and well-organized structure that ensures effective product management. The process mapping showed that, although key activities are clearly defined and executed under strict regulations, there are areas for improvement that, if optimized, could increase operational and financial efficiency. An overload of responsibilities was identified for the Credit Card Coordinator, which could compromise the process's efficiency. Additionally, the need for further updating of internal provisions and the forms used to assess customer payment capacity was highlighted, as they currently do not match the parameters established in the credit card policy. The internal control system, although robust, requires more dynamic ongoing monitoring and better integration of technologies such as Monibyte and Abanks to maintain operational consistency and efficiency. Furthermore, the financial analysis revealed that the current incurred loss-based model limits the company's ability to proactively anticipate and manage credit risks. Finally, adopting the IFRS 9 expected loss model would allow for more timely estimation of provisions, improving financial transparency and strengthening long-term stability.
